¿Qué tienen en común la derrama económica, la equidad de género y el fútbol femenino? Todas convergen en el escenario más grande del planeta: el Mundial de 2026. Y aunque faltan meses para el silbatazo inicial, las declaraciones recientes de la presidenta Claudia Sheinbaum y las cifras del Sports Summit Latam trazan un panorama revelador que vale la pena explorar. Desde la obtención de visibilidad conseguida el los últimos años por las mujeres dentro y fuera de la cancha, hasta la implicación del turismo y los ingresos para México, los datos parecen ser optimistas. Sigue leyendo para averiguar por qué.

Durante la conferencia matutina del 13 de junio, Claudia Sheinbaum subrayó el valor estratégico del Mundial de 2026 para México. Destacó que la Copa del Mundo de 2026 “va a poner en alto el nombre del país”, al proyectar una imagen global de organización, hospitalidad y liderazgo trinacional junto con Canadá y Estados Unidos. El evento promete atraer más de 5.5 millones de visitantes y generar más de mil millones de dólares en ingresos. Para Sheinbaum, este no es solo un torneo deportivo, sino una palanca clave para que México escale al quinto lugar mundial en turismo.
La Ciudad de México hará historia como la primera urbe en recibir tres inauguraciones de mundiales: 1970, 1986 y ahora 2026. Sheinbaum calificó este hecho como un “momento muy especial para México”, subrayando que la organización local también tendrá un papel clave para el éxito del evento. Aunque aún no confirma su presencia en el partido inaugural, recalcó que “la política es para unas cosas y el deporte para otras”.
El Mundial de 2026 y el avance del fútbol femenino
Más allá de la infraestructura y el turismo, el fútbol femenino está ganando un lugar destacado en el contexto mundialista. En el Sports Summit Latam 2025, Mariana Gutiérrez —presidenta de la Liga MX Femenil— afirmó que el fútbol de mujeres no es una moda, sino un fenómeno global en expansión. El evento reveló que partidos femeninos alcanzan audiencias digitales promedio de 329 mil visualizaciones, triplicando las expectativas iniciales.
Además, iniciativas como “FutFem donde sea” están revolucionando la manera de consumir estos encuentros: televisión abierta más streaming digital, con un aumento del catorce por ciento en la asistencia a estadios. Esta estrategia no solo mejora la visibilidad, sino también genera empleos para exjugadoras, narradoras y analistas. La equidad en el deporte se está construyendo desde el terreno y detrás del micrófono.
HER by Sports Summit: equidad como pilar
La plataforma HER by Sports Summit colocó en primer plano el liderazgo de las mujeres en el deporte. Voces femeninas, tanto en la cancha como en los medios, se posicionan como agentes de cambio. Y si bien la Copa Mundial aún no garantiza espacios equitativos, estos avances demuestran que el fútbol puede ser una herramienta de transformación social.
La Copa del Mundo de 2026 puede romper moldes. El Mundial de 2026 no solo será una vitrina para México ante el mundo, sino también una oportunidad para replantear quiénes cuentan las historias y quiénes ocupan el centro del campo. Si el país aspira a liderar en turismo y organización deportiva, también debe hacerlo en justicia y equidad. ¿Estará México listo para ese reto dentro y fuera del estadio?
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