¿Qué significa cumplir 100 años cuando se ha cambiado la historia de un país? Este 16 de junio, la memoria de Ifigenia Martínez vuelve a cobrar fuerza. A ocho meses de su fallecimiento, el eco de su historia y labor resuena con firmeza. Académica brillante, diplomática con visión internacional, y arquitecta de la política progresista mexicana, su centenario es un momento clave para repensar su legado.
En una vida marcada por la defensa de la autonomía universitaria, la justicia económica y la igualdad de género, Ifigenia Martínez se convirtió en una de las figuras femeninas más influyentes del siglo XX en México. Desde las aulas de la UNAM hasta el Senado de la República, su presencia dejó huellas profundas en la vida pública.
Del aula a la diplomacia
Nació en 1925, en un contexto donde pocas mujeres accedían a la educación superior. Se graduó en Economía por la UNAM y fue la primera mexicana en obtener un doctorado en Harvard. Su formación la llevó a la CEPAL, y después a ser jefa del área económica en la Presidencia de la República. También representó al país ante la ONU como la diplomática que supo unir técnica y sensibilidad política.
En 1967, asumió la dirección de la Escuela Nacional de Economía. Un año más tarde, enfrentó la represión del movimiento estudiantil de 1968. No solo denunció públicamente la violencia del Estado: fue encarcelada por ello. Su valentía marcó el inicio de una postura crítica que sostendría durante décadas.
Fundadora de la izquierda moderna
Su papel como crítica interna del PRI la llevó a impulsar la Corriente Democrática en los años 80, junto con Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo. En 1989, participó en la fundación del PRD, y años después, en 2011, fue una de las impulsoras de Morena. Su capacidad de leer el pulso de la política y apostar por nuevas formas de representación la mantuvo vigente durante más de seis décadas.
Fue diputada y senadora en múltiples periodos, pero su imagen se volvió aún más simbólica cuando, en octubre de 2024, entregó la banda presidencial a Claudia Sheinbaum. En un gesto cargado de historia, cerró un ciclo en el que ella misma fue precursora.
Homenajes y legado de Ifigenia Martínez
La pionera de la política mexicana falleció el cinco de octubre de 2024. En vida recibió reconocimientos como la Medalla Belisario Domínguez y su nombre fue inscrito en el Muro de Honor del Senado como “mujer de Estado”. Pero el mejor homenaje a Ifigenia Martínez es continuar luchando por las causas que defendió: educación pública, justicia social y una democracia con perspectiva de género.
A 100 años de su nacimiento, su vida nos recuerda que la transformación no es un instante, sino un trabajo colectivo y constante. Y que en cada conquista de hoy, hay huellas de mujeres como ella.
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