¿Puede una pelota, una muñeca o un set de construcción moldear las ideas de una niña o niño sobre lo que puede llegar a ser? El Día Internacional del Juego —celebrado el 11 de junio y establecido por la ONU en 2024— nos invita a reflexionar sobre una práctica que, aunque cotidiana, tiene profundas implicaciones sociales: el juego en la infancia. Lejos de ser solo entretenimiento, el juego es una herramienta de crianza… Y, muchas veces, también perpetúa los roles de género.

El tema del Día Internacional del Juego este 2025, “Choose Play – Every Day” (Elige jugar todos los días), enfatiza que jugar debe ser un derecho garantizado en hogares, escuelas y espacios públicos. Sin embargo, no cualquier juego promueve la igualdad. Según UNICEF, jugar impulsa el desarrollo emocional, fortalece habilidades cognitivas y permite afrontar contextos adversos. Pero si el juego está limitado por estereotipos de género, su potencial transformador se reduce drásticamente.
Desde edades tempranas, se asignan juguetes diferenciados por género: cocinas o muñecas para niñas, autos y herramientas para niños. Estas elecciones —socialmente inducidas— reproducen expectativas desiguales sobre lo que pueden hacer mujeres y hombres, reforzando desigualdades que después se trasladan a lo laboral, lo emocional y lo político.
Día Internacional del Juego y el debate sobre los roles de género
Numerosas investigaciones en educación infantil señalan que la división de juguetes por género condiciona la autoestima, la exploración y hasta las habilidades que niñas y niños desarrollan. En ese sentido, el Día del Juego no solo debe promover el acceso al juego, sino también al juego libre de estereotipos.
Iniciativas que abren caminos
- UNICEF respalda la campaña global por un juego inclusivo, promoviendo actividades comunitarias y escolares que integren a todos los géneros por igual.
- LEGO Education distribuye kits diseñados para estimular el pensamiento creativo sin asociarlo a un género específico.
- Right To Play, organización global, defiende el poder del juego para sanar traumas y construir lazos sociales en comunidades en crisis, con perspectiva interseccional.
¿Qué podemos hacer desde casa o escuela?
- Revisar los juguetes disponibles y fomentar el uso cruzado sin etiquetas.
- Promover juegos colaborativos donde se compartan tareas y liderazgos.
- Cuestionar frases como “eso es de niñas” o “ese juego es de hombres”.
- Utilizar recursos educativos como los que ofrecen LEGO y UNICEF para transformar el aula en un espacio de inclusión.
Más que jugar: imaginar futuros igualitarios
El Día Internacional del Juego no es solo una fecha para recordar la importancia de la infancia. Es una oportunidad para intervenir de forma activa en la construcción de una sociedad más justa desde los primeros años de vida. Jugar sin roles de género limitantes es dar libertad para imaginar, crear y ser. Y en esa libertad, se siembran las semillas de la equidad.
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