¿Qué ocurre cuando la violencia estructural y la desigualdad se convierten en parte del día a día de millones de mujeres? La respuesta se refleja en la salud mental femenina, una dimensión frecuentemente invisibilizada en las políticas públicas. En México, la salud mental en contextos vulnerados es una crisis silenciosa que exige atención inmediata.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 70.1 por ciento de las mujeres mexicanas de 15 años o más han experimentado al menos un incidente de violencia, ya sea psicológica, física, sexual, económica o patrimonial . Este entorno de violencia estructural tiene consecuencias directas en la salud mental femenina, incrementando los casos de depresión, ansiedad y trastornos de estrés postraumático.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la violencia de pareja y las agresiones sexuales provocan en las mujeres graves problemas de salud mental, incluyendo un mayor riesgo de suicidio y trastornos depresivos.
Salud mental en contextos vulnerados: una mirada desde los programas del Bienestar
El gobierno mexicano ha implementado programas para atender la salud mental en contextos vulnerados. La Línea Bienestar para las Mujeres ofrece servicios de acompañamiento psicológico, médico y legal para atender casos de violencia, además de orientación para el desarrollo integral y ejercicio de los derechos de las mujeres.
Además, el programa Salud Casa por Casa, considerado el programa de prevención más grande del mundo según la presidenta Claudia Sheinbaum, busca llevar atención médica y psicológica directamente a los hogares, priorizando a las poblaciones vulnerables.
Iniciativas locales y su papel en la atención de la salud mental femenina
En la Ciudad de México, se han inaugurado Centros de Cuidado de las Emociones, como el ubicado en la alcaldía Tlalpan, que forman parte de una estrategia para garantizar el acceso a la salud mental a toda la población . Estos centros ofrecen atención psicológica y programas de prevención, especialmente dirigidos a mujeres en situaciones de vulnerabilidad.
La salud mental en contextos vulnerados es una problemática que afecta profundamente a las mujeres en México. Si bien existen programas y políticas públicas orientadas a su atención, es fundamental fortalecer estas iniciativas y garantizar su accesibilidad y eficacia. La salud mental femenina debe ser una prioridad en la agenda pública, reconociendo su importancia para el bienestar individual y colectivo.
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